En nuestra clínica de fisioterapia, se dedica a proporcionar tratamiento y alivio a quienes padecen diversas afecciones músculo-esqueléticas. Una de las más comunes es la epicondilitis lateral -también conocida como codo de tenista-, una dolencia dolorosa que afecta a los tendones del codo. En este artículo, examinaremos qué es la epicondilitis lateral, junto con algunos de sus síntomas y posibles opciones de tratamiento.

¿Qué es la epicondilitis lateral?

La epicondilitis lateral, también conocida como codo de tenista, es una afección dolorosa que afecta al tendón que conecta los músculos del antebrazo con el epicóndilo lateral del codo. No es un problema exclusivo de los jugadores de tenis; también puede afectar a atletas que practican otros deportes, así como a personas con determinadas ocupaciones, como fontaneros o pintores. Incluso puede estar causada por ciertas enfermedades degenerativas, como la artritis.

¿Cuáles son los síntomas de la epicondilitis lateral?

El principal síntoma de la epicondilitis lateral es el dolor en el epicóndilo lateral, en la parte exterior del codo y la parte superior del antebrazo. El dolor también puede irradiarse por el lateral del antebrazo hasta la muñeca y los dedos. El dolor puede ser gradual y empezar a aparecer tras realizar determinadas actividades, o aparecer de repente. Puede exacerbarse al agarrar objetos o extender la muñeca.

Diagnóstico y tratamiento de la epicondilitis lateral

Para diagnosticar la epicondilitis lateral, el médico hará la historia clínica del paciente y una exploración física. En los casos graves, también puede solicitar una radiografía o una resonancia magnética (RM) para descartar otras posibles causas del dolor. Cuando el dolor se produce en situaciones donde el origen se produce por una lesión en el tejido tendinoso. El diagnóstico debe guiarse por valoraciones funcionales y por una ecografía como realizamos en nuestro centro, en casos excepcionales se puede utilizar la resonancia.

El tratamiento puede incluir reajustes de carga e intensidad para el tendón, utilización de tratamientos para la mejora de la inflamación como la diatermia y en algunos casos podemos utilizar vendajes funcionales para reducir la carga de trabajo del tendón.

Hay que recalcar que este tipo de dolencias no se pueden ver a través de una radiografía.

Así como es importante trabajar aunque el dolor no desaparezca, pero determinará los resultados los diferentes tipos de ejercicios, como y cuanto hacerlo.

Rehabilitación de la epicondilitis lateral

Es importante empezar a fortalecer y estirar los músculos afectados por la epicondilitis lateral una vez que el dolor empiece a remitir. Esto puede hacerse mediante ejercicios específicos diseñados para mejorar la flexibilidad y la fuerza del antebrazo, incluidos los ejercicios de flexión de muñeca, de fortalecimiento de los extensores y de estiramiento. Un fisioterapeuta también puede proporcionar terapia manual para ayudar a aumentar el flujo sanguíneo a la zona afectada y mejorar la amplitud de movimiento.

Prevención de la epicondilitis lateral

No siempre es posible prevenir la epicondilitis lateral, ya que determinados deportes o actividades pueden sobrecargar los músculos y tendones del antebrazo. Sin embargo, se pueden tomar algunas medidas para intentar reducir el riesgo de desarrollar epicondilitis lateral. Entre ellas, descansar el codo cuando empiece a sentirse fatigado o dolorido, utilizar el equipo y la forma adecuados al practicar deportes, y realizar regularmente ejercicios de entrenamiento de fuerza para fortalecer los músculos del antebrazo.

En resumen, la epicondilitis lateral, o codo de tenista, puede causar un dolor importante y limitar las actividades de quienes la padecen. Afecta con mayor frecuencia a los deportistas y a personas con determinadas ocupaciones, pero también puede estar causada por ciertas enfermedades degenerativas. Afortunadamente, existen varias opciones de tratamiento y rehabilitación que pueden ayudar a aliviar el dolor y mejorar la amplitud de movimiento del codo afectado.

En muchos casos, prevenir la epicondilitis lateral puede ser tan sencillo como descansar la zona afectada y utilizar el equipo y la forma adecuados al practicar deportes. Si sospechas que puedes tener epicondilitis lateral, te animamos a que pidas una consulta en nuestro centro para que trate tus síntomas específicos y recibas el tratamiento más adecuado.